C.O.D.E: Capturar, Organizar, Destilar, Expresar

El sistema CODE es la base del método de gestión del conocimiento Building a Second Brain de Tiago Forte y consta de un proceso de cuatro pasos, Capturar, Organizar, Destilar y Expresar. 

Este proceso pretende ser una referencia en cuanto a la gestión del conocimiento y al proceso creativo: es un marco flexible y no lineal en el que apoyarte.

«La tecnología evoluciona de forma constante, pero la esencia del proceso creativo se mantiene igual: capturar información, organizarla en diferentes fragmentos, destilar la información más importante y por último expresar el propio punto de vista a través de la escritura, lo oral, el diseño, la enseñanza y otras disciplinas.»

Tiago Forte

Es muy probable que unos cuantos años las aplicaciones que hoy conocemos y usamos hayan cambiado tanto que no las reconozcamos, o directamente que no existan. La idea de un sistema como CODE es contar con un proceso que te guíe y que no cambie si decides usar otro programa o aplicación.

Capturar

Guardar información relevante tanto de internet como de otras fuentes

Las aplicaciones de notas lo ponen muy fácil hoy en día para capturar cualquier tipo de información: artículos, vídeos, subrayados de libros e ideas que se te ocurran, por poner algunos ejemplos. Casi todas las aplicaciones de notas cuentan con un Web Clipper, con el cual puedes guardar y clasificar lo que vas capturando.

Lo peligroso de instaurar un hábito de captura es no contar con un filtro que te sirva para que tu sistema de gestión del conocimiento no acabe como una wikipedia impersonal. Tu aplicación de notas no debe hacerle la competencia a Google, no es conocimiento universal y accesible a todo el mundo, sino información y conocimiento relevante para ti. 

Lo ideal es que captures el diez, el cinco o el uno por ciento de aquello que te resulte:

1/ inspirador (esa chispa inexplicable al toparse con algo que sorprende);

2/ útil (algo que pueda servirte para un futuro proyecto);

3/ difícil de encontrar de nuevo (aquello de lo que sabes que no vas a acordarte);

4/ o que sea conocimiento único y personal (lecciones que has extraído de experiencias propias). 

Por último en cuanto a la captura: sé consciente de lo valiosas que son tus ideas. Vale la pena que te pases quince segundos apuntando tu perspectiva y tu opinión. Es un acto radical de confianza en una misma, tener certeza de que las experiencias y puntos de vista propios merecen ser documentadas.

Organizar

Estructurar lo capturado y prepararlo para su uso posterior

Antes de empezar a organizar deberías haber capturado ya información, ya que sería contraproducente pasar horas y horas creando una jerarquía de organización con carpetas vacías y basada en conceptos complicados.

Tiago propone el método PARA, basado en proyectos y además centrado en el oportunismo, en el sentido de no organizar por organizar, sino solo si hace falta y si esta información toma relevancia de alguna manera en alguno de tus proyectos creativos (no siempre tiene que ser un proyecto relacionado con el trabajo, también puedes usar tu sistema de gestión del conocimiento para cualquier tipo de proyecto creativo, un ejemplo: pensar un regalo para una amiga. Puede que capturaras en tu sistema que a tu amiga le gusta un grupo de música concreto. Pues ya tienes una pista para un regalo guay.

Siguiendo estos principios no dedicas tiempo a organizar tus notas, sino que dedicas tiempo a interactuar con el conocimiento que has guardado en un contexto concreto (un proyecto, un área…).

Destilar

Extraer lo más relevante para tu contexto y tus metas

Llegados a este paso, ya has capturado ideas y fuentes relevantes, las has organizado por proyectos, es decir, por accionabilidad.

Ahora toca destilar las ideas principales de la información que tienes en tu sistema para crear bloques de conocimiento que tengan que ver con tu contexto, tus intereses, tu trabajo y tus metas.

El enfoque que propone Tiago al destilar es el de priorizar el contenido de tus notas (note-first approach). En lugar de dedicar tiempo a idear un sistema de etiquetas o de enlaces, ¿por qué no concentrarse en el contenido de las notas, en el conocimiento en sí?

Tiago también sugiere el Resumen Progresivo como una forma de destilar tus notas cada vez que te las encuentres, siguiendo unos pasos concretos. Primero se subraya en negrita lo más importante y luego se destacan (en amarillo o en otro color) lo mejor de lo mejor. Por último, resumes de forma sucinta y con tus propias palabras lo que esa nota significa para ti y para tu trabajo, añadiéndole tu punto de vista.

Es muy probable que no se completen todos los pasos del resumen progresivo en cada nota de tu sistema, pero con aquellas que sí lo haces acabas con valiosos paquetes intermedios, bloques de conocimiento que puedes aprovechar para diversos proyectos, a largo y corto plazo.

Expresar

Convierte información en productos creativos que dejen huella fuera de tu aplicación de notas

Llegamos al último paso, en el que escribirás artículos, entradas de blog, correos electrónicos, libros, canciones, pintarás cuadros, harás álbumes de fotos, regalos… todo ello a partir de los bloques de conocimiento que has capturado, organizado y luego destilado.

Como mejor se aprende es con las manos en la masa, haciendo cosas, probando y desafiando los modelos mentales que tienes sobre el proceso creativo y de aquello que quieres crear.

Durante el proceso de creación te darás cuenta de que al estar respaldado por un sistema de gestión del conocimiento nunca empiezas de cero y que no tendrás que volver a enfrentarte a la página (o a la pantalla, o al lienzo) en blanco.

Es importante insistir en que el sistema C.O.D.E no está pensado como un proceso lineal. Cuando llegues a una masa crítica de notas capturadas te moverás por todas las fases. Lo interesante es contar con una mentalidad flexible y desarrollar intuición en torno a un flujo de trabajo que tenga sentido para ti. 

A lo que sí que te animo, si crear algo a partir de tus sistema entra dentro de tus planes y casa con tus valores, es que intentes llegar a la fase de expresar más temprano que tarde, evitando el perfeccionismo. Así todos nos enriqueceremos de tu perspectiva y de tus ideas, que no es plan de que se queden para siempre dentro de las cuatro paredes de tu aplicación de notas.